¿Qué es Home Sharing?
Los programas para compartir en el hogar conectan a dos o más personas no relacionadas que pueden beneficiarse de vivir juntos. La casa compartida puede ser una casa, apartamento, condominio o casa móvil. Por lo general, el propietario o residente principal proporciona un dormitorio privado y acceso a espacios compartidos como la cocina, la sala de estar y el baño. A cambio, la persona que se muda puede pagar el alquiler, ayudar con las tareas del hogar o hacer una combinación de ambos, dependiendo del acuerdo específico.
Los adultos mayores, las personas con discapacidades, los padres solteros, los adultos que trabajan o cualquier persona que busque vivienda asequible y apoyo pueden participar en los programas para compartir el hogar. Las organizaciones locales sin fines de lucro administran estos programas, pero son independientes entre sí. No están dirigidos por el Centro Nacional de Recursos de Vivienda Compartida (NSHRC) ni están regulados por los gobiernos estatales.
¿Cómo funcionan los programas para compartir en casa?
Los programas para compartir en casa funcionan de manera diferente dependiendo de la organización que los ejecute, pero por lo general el proceso se ve así:
Encuentra un programa: Comienzas buscando un programa en tu estado, o uno que se adapte a tus necesidades si hay múltiples opciones, y comunicándote con ellos para expresar tu interés.
Emparejar con un hogar: Los programas emparejan a las personas de diferentes maneras. Muchos te ayudarán a conectarte con una casa que se ajuste a tu presupuesto y preferencias de vivienda, mientras que algunas te permitirán navegar por los listados disponibles por tu cuenta.
Prepárese para compartir el hogar: Cuando se encuentra una posible coincidencia, la mayoría de los programas organizan una entrevista tanto con usted como con el propietario. Por lo general, se requieren referencias y verificaciones de antecedentes en esta etapa. Algunos programas también incluyen una inspección de la casa y una introducción guiada para ayudar a ambas partes a sentirse cómodas.
Comparte la casa: Ahora que te han emparejado con una casa y el trabajo de fondo está completo, comenzarás a compartir la casa, ya sea pagando el alquiler o ayudando con las tareas del hogar, dependiendo de lo que tú y el dueño de la casa acordaron. A lo largo del acuerdo para compartir el hogar, la organización generalmente permanece involucrada y disponible para brindar apoyo, aunque el nivel de participación puede variar de un programa a otro.
¿Cómo me inscribo en un programa para compartir el hogar?
Los programas para compartir el hogar generalmente son dirigidos por organizaciones sin fines de lucro. Para encontrar un programa en tu estado, comienza con el directorio NSHRC, que enumera los programas y su información de contacto. Algunos estados pueden tener varias organizaciones, así que puedes elegir la que funcione mejor para ti.
Después de contactar a un programa, pueden ayudarte a encontrar una casa que se ajuste a tus necesidades o, en algunos casos, puedes buscar listados por tu cuenta. Una vez que se hace una coincidencia, normalmente tendrás que completar una solicitud. La mayoría de los programas también requieren una verificación de antecedentes y referencias para garantizar la seguridad.
¿Y si necesito ayuda?
Si necesitas ayuda para encontrar un programa de vivienda compartida o tienes preguntas, envía un correo electrónico al Centro Nacional de Recursos de Vivienda Compartida a info@nationalsharedhousing.org. Ellos pueden responder tus preguntas y conectarte con un programa en tu área.